De la devoción,
la participación, la organización
y sentirse parte del pueblo de
Galapagar
Mayo 2022 / Nando C.
Como todos los segundos domingos del mes de mayo y después de estos años de restricciones provocados por la pandemia de la COVID 19, se ha celebrado la XXXVI Romería en honor de Nuestra Señora de los Desamparados de Galapagar.
Desde primera hora de la mañana del pasado día 8 de mayo, tanto el pueblo como la explanada de la Ermita de El Cerrillo estaban preparados para una bonita jornada de devoción a la Virgen, de participación ciudadana, de notable organización por parte de la parroquia, del Ayuntamiento, Guardia Civil, Policía Local y Protección Civil.
Decenas de vecinos de Galapagar y de pueblos de los alrededores acompañaron a la Virgen desde la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Galapagar, entre las calles del pueblo, para luego trasladarla a hombros por la dehesa de Galapagar hasta conectar con la Cañada Real Segoviana con dirección a la Ermita del Cerrillo.
Ciertamente el traslado por los caminos es un espectáculo. Decenas de jinetes y sus caballos engalanados para la ocasión, caminantes que acompañan a la imagen, ciclistas que, haciendo su ruta dominical, se unen aunque sea un rato a la fiesta.
Tambores, dulzainas, jotas… la música y el baile nos da una visión alegre y festiva de día.
Tras un par de horas de camino, fueron llegando al área recreativa merendero del Cerrillo, donde se encuentra la Ermita. La Iglesia se construyó en 1447 dedicada a San Bartolomé, aunque es conocida como la Ermita de El Cerrillo. Fue el Marqués de Santillana quien financió su construcción (se habla de una donación de 1.000 maravedíes).
Con el paso del tiempo la construcción se fue debilitando y debido a su mal estado se reconstruyó a finales del siglo XVII y comienzos del XVIII. Finalmente, su última restauración se realizó en el siglo XX.
Cientos de personas recibieron a la Virgen para la ofrenda de flores, posterior Misa y con todo preparado para la posterior comida campera.
Carpas, manteles en el suelo, mesas, galapagueños y galapagueñas de todas las edades dispuestos a celebrar un día tan especial y señalado para el pueblo de Galapagar.
Si no la has vivido, la Romería de la Virgen de los Desamparados, te espera para el año que viene.
Nosotros tuvimos la suerte de asistir, y desde aquí damos gracias infinitas al Centro Ecuestre Escudero, por recibirnos en sus instalaciones y entre música, amigos y barbacoa, hacernos pasar un día espectacular y sentirnos como en casa, como en familia.